Hemos Comido…en este restaurante que era uno de los clásicos de toda la vida de la ciudad de León y del tengo muy gratos recuerdos de la época de estudiante de veterinaria de un entrañable amigo, pero hace unos años cerró sus puertas y ahora ha vuelto a abrir con aires totalmente renovados.

Se localiza en Santa Ana, en la parte inferior del Barrio Húmedo. El nuevo local ha sido totalmente reformado, e intentan darle un aire de modernidad exclusiva del que carecía antes. La carta tiene pocos platos. En esta ocasión éramos seis comensales y pedimos unos entrantes, y después un segundo plato. Mientras esperábamos nos pusieron un buñuelito de pan frito con queso, y un consomé de bienvenida, el consomé hubiera estado mejor con menos sal. Los entrantes a compartir venían ya emplatados para cada uno el suyo, lo cual es de agradecer ya que hay platos complicados para compartir; foie con carpaccio de higos frescos que estaba bastante bueno, rollitos de cecina rellenos de foie y compota de manzana que también estaba muy bueno, y el que más me gustó Soufflé de Bacalao con mayonesa de ajo arriero, bastante bueno.En los segundos la nota a destacar fue la cantidad de los platos, totalmente irrisoria, raciones ínfimas. De segundos pedimos dos raciones de rape alangostado, un plato muy típico de casa de mi madre, perplejos nos quedamos cuando nos dijeron que eran dos raciones y no una repartida entre dos, también nos enteramos que era congelado por la desdichada explicación del camarero. Otro de los segundos fue atún toro a la plancha, totalmente crudo y frío por dentro, uno de mis platos favoritos y que tuvieron la desdicha de quitarme las ganas de comerlo y dejarlo entero, tambien tuvieron la «amabilidad» de cobrarlo en la nota final , la carrillera al chocolate según el comensal bastante buena y la ración más generosa, otro de los comensales pidió cordero también más generosa que las anteriores pero sin llegar a la abundancia. Y por último Templada de pollo de corral tandoor, carabinero, tomate, dátiles y tobika segun el comensal muy bueno. Del postre pasamos pues se nos quitaron las ganas, la mayor de las sorpresas vino con la cuenta, que ascendió con dos botellas de vino de crianza no me acuerdo de que marca, y seis cervezas pos casi 500€. En fin, un lugar a tener en cuenta para no volver. Una pena, ya que el antiguo Faisán tenía una carta mucho más amplia, con productos de buena calidad y buenas recetas de comida tradicional, y el famoso pollo de corral con oyocántaro, y eso sí, muchísimo más barato.
 
El Faisán Dorado fue uno de los clásicos de la cocina leonesa, de la buena cocina de León. El cocinero que hiciera famoso en estas tierras el plato mediterráneo de pollo de corral con bogavante, ha cedido los trastos a Rodrigo García Fernández, joven profesional que tiene ya tras de sí una larga carrera y que ha cambiado radicalmente el restaurante. El Faisán Dorado se ha convertido en un lugar presidido por el minimalismo más exquisito, con una decoración en estricto blanco y negro que pretende resaltar la importancia de las modernas viandas que en su comedor se sirven. Rodrigo intenta hacer una cocina de temporada con productos de la tierra leonesa, aunque, naturalmente, no desdeña el empleo de una gran variedad de complementos procedentes de lugares más exóticos. «Queremos -dice- emplear al máximo los productos de la tierra, creemos que es algo muy importante a la hora de definir la personalidad del restaurante. Para ello hemos empleado mucho tiempo antes de abrir al público, visitando y conociendo proveedores que puedan ofrecernos productos de la máxima calidad. Naturalmente los pescados tenemos que traerlos de fuera, ¡es una lástima que aquí no tengamos mar!». En el nuevo Faisán Dorado los detalles están cuidados al máximo y su carta tiene cuatro únicos apartados: Abre bocas, Mar, Tierra y Aire dulce. En los entrantes destaca poderosamente su Soufflé de Bacalao con mayonesa de ajo arriero, patatas y clorofila de perejil, una composición que Rodrigo ya había presentando en alguno de los restaurantes en los que trabajo con anterioridad, pero al que ha añadido los toques necesarios para convertirlo en una sorprendente delicia. Recordando a Benito y como homenaje al gran cocinero que le precedió en el lugar, ha creado una Templada de pollo de corral-tandoor, carabinero, tomate, dátiles y tobika, que nada tiene que envidiar al mítico pollo con bogavante o carabineros que hicieron famoso el establecimiento. En el capitulo marino, les recomendamos su Ventresca de atún-toro marinada y asada con ajo blanco y texturas de tomate. El ajo blanco lo fríen con lo que adquiere una consistencia diferente, y las distintas presentaciones del tomate son muy divertidas. En carnes ofrece la carta cochinillo, carrillera, lomo bajo y lechazo, o Paletilla asada a 80 grados con cebolla ahumada, ajo confitado y membrillo, que es sin duda la gran estrella para carnívoros en la carta del Faisán. Es importante reseñar que una de las técnicas más habituales en la casa es la cocción o el horneado al vacío, con lo que los alimentos no pierden ninguna de sus propiedades. En los postres hay queso, chocolate, piña y chuches, siempre refiriéndonos a la carta. Merecen atención las Castañas del Bierzo con hongos y texturas, por sus connotaciones leonesas, el Chocolate líquido y sólido con aceite de oliva, por su originalidad y las Chuches, con su mousse de piruleta, helado de Ronchitos, espuma de chicle, salsa de choco y compota de fruta de la pasión, por su colorido y el buen humor que genera. Bueno esto figura en las carta, pero cada semana hay un menú degustación (35 euros más IVA) y cada día uno para ejecutivos, nombre que queda muy fino, de 18 euros. En el Faisán Dorado, el equipo es joven, tiene muchas ganas de trabajar y está perfectamente dirigido por Roberto. «Estoy encantado con mi gente -explica- durante estos dos meses y medio hemos hecho el rodaje y ahora comenzamos a circular con el motor a tope. Tengo que dar las gracias a mis padres, mi novia y mis amigos, por lo mucho que me han ayudado para poner en marcha el restaurante». El Faisán Dorado ha comenzado con buen píe, habrá que seguir sus evoluciones, pero todo apunta a que será una de las referencias leonesas de la nueva gastronomía.
 
27/05/2007 MARCELINO CUEVAS El diario de León
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Ya hay ganadores del concurso de la II Semana de la Tapa Leonesa, organizada por Asociación de Empresarios de Hostelería del Barrio Romántico en colaboración con la Concejalía de Turismo y Fiestas del Ayuntamiento de León. Ésta se desarrolló entre los días 8 y 20 de octubre y el jurado, compuesto por siete personas, dio ayer su veredicto, de entre los 45 establecimientos participantes en las categorías de bares y restaurantes.
En el concurso Tapa de Chateo, en la que podían participar los bares, se hizo con el premio a la Mejor Tapa de Chateo Casa Ezequien con su ‘Pastel de puerro con cecina y salsa de pimientos de Fresno’. El premio a la mejor Tapa Tradicional recayó en La Abacería II que presentó su ‘Y el jueves…. deconstrucción del tami-tami’. La Jouja logró el premio de Innovación con ‘Geléde reineta y lengua con sopa agridulce de prieto picudo’. El premio a la mejor Presentación fue para Cambalache Argentino por ‘Hojaldre de lechazo churro con frutos secos y salsa balsámica de prieto picudo’. El Accésit Tapa Leonesa recayó en el bar Cuervo por su ‘Pastel de pollo de corral en tosta de Montejos y mermelada de tomate’. En el concurso Tapa de Aperitivo, al que concurrían los restaurantes los premiados fueron los siguientes: mejor Tapa de Aperitivo,El Faisán Dorado (‘Lacón con patatas de La Cabrera y helado de pimiento de Fresno de la Vega’), Innovación, La Copla (‘Maki de morcilla de León’), Presentación, Zuloaga (’Brick de bacalao con pisto, mango y plátano caramelizado con salsa vizcaína’), y dos accésit para Casa Condeso(‘Textura de pato con cecina de León’)y Yesca (‘Queso de cabra con cebolla caramelizada y reducción de Módena’).
 

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Cantareros, 2 24003 León 987256609

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