El nuevo local conserva las señas de identidad, incluidas las fotos amarillentas, los carteles y las caricaturas del antiguo. Y el cocido madrileño, servido a diario, sigue siendo el estandarte de la casa, el plato con una proporción importante. Quizá el único de la ciudad que compite con el de Malacatín por ser el más copioso, sin olvidar el revuelto de morcilla, unas gambas al ajillo frescas, lubina a la bilbaína, y una ternera en su jugo con pimiento verde y patatas panadera, rodeado de unos vinos tradicionales y antañones, y de postre unos flanes y natillas caseros, en el más ambiente familiar y campechano del casticismo. Éramos seis y todos pues comimos lo mismo, cocido madrileño, bastante bueno y abundant, pero nada que ver con el de garbanzo del Fuente Dé El precio es excesivo, el servicio es excelente, pero es de esos locales que viven de la fama y en los que predomina que cualquier tiempo pasado fue mejor.

Entradas

Sopa de cocido
Boquerones de Málaga fritos
Croquetas de la Casa
Chistorra casera
Morcilla de Burgos
Espárragos trigueros a la plancha
Espárragos blancos con dos salsas
Mollejas encebolladas
Gambas al ajillo
Ancas de rana al ajillo o rebozadas
Salmón ahumado con salsa tártara
Queso manchego
Jamón ibérico
Lomo ibérico de bellota

Ensaladas

Ensalada mixta
Cogollos de Tudela con anchoas
Ensalada de endivias al roquefort
Ensalada de pimientos rojos asados
Ensalada de ventresca con pimientos asados
Endivias con salmón

Huevos

Revuelto Gran Tasca
Revuelto de espárragos y ajetes
Revuelto de morcilla
Revuelto de bacalao

Pescados

Filetes de gallo
Chipirones en su tinta o a la plancha
Merluza en salsa de chipirones
Delicias de merluza
Bogavante con arroz caldoso

Carnes

Callos a la Madrileña
Chuletitos de cordero lechal
Steak Tartar
Entrecot de buey
Solomillo a la parrilla
Carne roja a la piedra