Hemos Comido…en El Jardí en Paret del Valles, una comida de trabajo.

Volver al jardín en siempre un placer, un vergel en pleno centro urbano. Pero hacía demasiado calor para mí, así que al comedor, comida y chácahara con el jefe, que nos enseñó su bodega y sus tesoros.

Restaurante El Jardi Parets

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Siempre que me acerco a este lugar termino charlando con mi anfitrión, una persona muy versada en general, y en particular en el mundo de la gastronomía, los vinos de la zona los maneja y conoce como pocos, algo hoy difícil en la zona de Cataluña, que se ha dejado influenciar por la mayor demanda de vinos de fuera de la comunidad.

Restaurante El Jardi Parets

Comenzamos con una tapa de salchichón, muy en su momento y un pan tostado.

Restaurante El Jardi Parets

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Para empezar, una exqueisada exquisita, creo que la mejor que he comido en Cataluña.

Restaurante El Jardi Parets

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Continuamos con un rico pulpo gallego. Muy bien asado, sabroso y terso, como es el pulpo.

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Para terminar un usobuco de chuparse los dedos.
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El sitio muy recomendable, pero me quedo con la asignatura pendiente de su liebre Royal.

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Al final de la comida, y después de una larga charla, nos enseñó su tesoro: la bodega. donde acopia su colección de vinos y sobre todo su colección de calvados. De estos últimos le prometí una botella del calvados cántabro que destilan en Liébana, en la sidreria Pago de Tolina.

Restaurante El Jardi Parets

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Por El Mule

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