Las lubinas Aquanaria son un producto de máxima calidad con unas características diferenciales:
Sabor intenso y excelente, textura firme y melosa. Dos características que hacen de la lubina Aquanaria un éxito a nivel mundial.
Las costas atlánticas de Canarias son su hábitat y aliado porque ofrecen las condiciones óptimas de cría, con fuertes corrientes y una temperatura ideal y constante. Las lubinas viven a 2 millas de la costa sur de Gran Canaria, nadando y luchando contra las corrientes hasta adquirir el nivel de grasa y textura óptimos que las convierte en un producto de alta gama.
Cuando me acerqué a esta presentación no las tenía todas conmigo, la mayoría del pescado de piscifactoría tiene ese resabor a basa, a fangos y pensé que este no iba a ser distinto, gran equivocación, mi primer contacto fue en crudo, niguiri y sashimi sabor limpio a pescado fresco sin distinción prácticamente de la lubina habitual salvaje, quizás alguna diferencia de textura, pero mínima ya que a simple vista es pescado es el mismo que puedes encontrar de pesca salvaje.
Un buen tamaño que completa con un sabor intenso y una textura firme y melosa, con una infiltración perfecta, algo más melosa que la habitual, lo que la hace especial para el crudo, en cuanto a las recetas mas elaboradas la diferencia en nula, arroz al cuadrado, marmita, coca, vinagreta, yakitoro, con salsa de algas etc.. 
Aquanaria está enfocada en la cría de lubinas de entre 2 y 4 kilos de peso. Las lubinas se crían durante un periodo mínimo de 36 meses en las granjas situadas en altamar, siguen una alimentación sana y equilibrada y son capturadas mediante un sistema de pesca que persigue minimizar todo lo posible el estrés y el sufrimiento del animal. “La pesca se hace por la noche. Salen los barcos y las lubinas se encuentran en una red enorme similar a un cerco. Esta red se va cercando poco a poco y cuando la suben al barco, se introducen las lubinas en hielo, provocando una inmediata muerte de la lubina por shock térmico
