Hemos Comido…en el Real Club Marítimo de Santander, uno de los comensales no había estado nunca y quería conocerlo.

Marzo 2018. Para comer en el Club Marítimo hace falta ser socio o ir acompañado de uno, el cumpleañero era socio y nos invitó a celebrar su aniversario.

2018 03 maritimo 001

Las vistas desde el comedor abarcan toda la bahía. Este día resultó lluvioso y se podía apreciar perfectamente la marca que imprime el río Cubas con todo el limo que arrastra y que avanzaba hacia la bahía conforme la marea sube. La bahía siempre tiene algún atrayente, te puedes pasar las horas muertas observándola.

2018 03 maritimo 001

Las otras veces que he comido aquí ha sido en el comedor privado, en esta ocasión estrenaba el comedor general. La dirección de restaurante corre a cargo de nuestra conocida y amiga Teresa Fernández. 

2018 03 maritimo 001

Tomamos unas cervezas a modo de aperitivo y continuamos con champagne Mumm. Un vino espumoso de DO Champagne con racimos seleccionados de pinot noir, meunier, chardonnay y pinot meunier. 

2018 03 maritimo 001

Mumm Cordon Rouge es el champagne de las grandes ocasiones y eventos. Es famoso en el mundo entero, un valor seguro con un montón de historia tras de sí. Tanto es así que la banda roja de la etiqueta que como homenaje a algunos de sus más prestigiosos clientes, Mumm decide adornar sus botellas con una cinta de seda roja, una referencia a la Legión de Honor y cerrarlas con un sello ovalado. Gracias a Mumm Cordon Rouge, Mumm se ha convertido en la ‘Maison’ más importante de champagne.

2018 03 maritimo 001

Una serie de ahumados de Keia como aperitivo: salmón, magret y bonito. El salmón ya lo conocía y es una de las mejores elaboraciones que conozco. El bonito resultó de calidad similar al salmón. Del pato no puedo opinar pues no es santo de mi devoción, pero a los otros comensales les parecio buenísimo, como el resto de las elaboraciones del aperitivo.

2018 03 maritimo 001

Otro gran atrayente de la comida fue el pan. Cuatro diferentes, todos de torta, de los cuales probé tres a cual mejores. Muy uniformes, sin grandes alveolos, pan de espelta, de maíz y de trigo.

2018 03 maritimo 001

Compartimos entre los cuatro comensales, comenzando por un cebiche de lubina. Con una leche de tigre de diez, punto perfecto acompañado de platano frito (no me gusta nada, no sabe a nada), cebolla roja y unos maices que tampoco me molan nada en estas elaboraciones. El cebiche es muy recomendable, si te acercas por el Club y te gustan estos semicrudos no puedes perdértelo.

2018 03 maritimo 001

2018 03 maritimo 001

Otra de las raciones que tomamos fue una burrata. Esta es la primera vez que me gusta, la mayoría de las que he probado no sabían a nada, pero esta se diferenciaba claramente de las que había tomado hasta ahora. Acompañada por unos tomates deshidratados y una salsa que tenía como base también esta fruta. Seguimos con unas raciones que paso a paso conquistan por la calidad de los ingredientes.

2018 03 maritimo 001

Voy a explicar algunas de las diferencias básicas que hay entre estos dos grandes quesos frescos italianos. Y así entender algunas de las grandes diferencias que tiene la burrata con su hermana la mozzarella. En muchas ocasiones se consideran a la burrata como una variante de la mozzarella, debido a que la mozzarella es uno de los ingredientes principales con que se elabora la burrata. Pero podemos definir la burrata como un queso en sí mismo y no un subproducto de la mozzarella. El nombre de burrata proviene de una de sus principales características: la textura cremosa y suave que recuerda la de la mantequilla, “burro” que en italiano significa mantequilla. La principal diferencia es que la burrata es mucho más cremosa y suave que la mozzarella. Los dos quesos están elaborados con un método de elaboración de pasta hilada. Pero la burrata además esta  rellena de crema de leche “stracciatella” en su interior, que le aporta una composición mucho más sabrosa, jugosa, cremosa y suave.

2018 03 maritimo 001

Continuamos con unas rabas de cabeza de chipirón. Este es el único sitio que conozco donde hacen así las rabas, todo un descubrimiento. Buenas no, lo siguiente. Fritura justa, harina también justa y perfectamente escurridas, ni una gota de aceite en el plato. Textura y sabor, mucho sabor.

2018 03 maritimo 001

Para terminar con la entradas un tataki acompañado de mayonesa de wasaby (a caballo entre mousse y vaporosa mayonesa). Tostado en su exterior y sangrante en su interior, un vicio.

2018 03 maritimo 001

2018 03 maritimo 001

Y pasamos al plato fuerte de la comida, un clásico del lugar, lubina a la sal. Aunque conocida siempre resulta espectacular, apabullante, nunca falla su punto. La lubina siempre es de origen salvaje por lo que la diferencia resulta obvia.

Preparar el pescado a la sal tiene algo mágico, misterioso. Eso de enterrar el pescado bajo una tonelada de sal, que se cocine a la perfección y que no sea salmuera, me encanta y a la vez me alucina.

2018 03 maritimo 001

2018 03 maritimo 001

2018 03 maritimo 001

En esta ocasión para uno de los comensales resultó la sorpresa del día acompañar la lubina a la sal con aceite ahumado Castillo de Canena, tal y como nos aconsejó sabiamente Teresa. Impresionante, doble descubrimiento, aunque la lubina es un antiguo conocido, en este lugar siempre resulta especial.

2018 03 maritimo 001

2018 03 maritimo 001

No hace mucho que ha pasado a formar parte del equipo Teresa y se nota. Un equipo perfecto, en cocina José Ramón González y en sala Teresa Fernández, buen servicio y buena mesa. Están de enhorabuena los socios del Club al contar con este equipo de profesionales.

2018 03 maritimo 001

Por El Mule.

Etiquetas del articulo

Compartir

Categorías
Scroll al inicio